De hecho, la coronación se dio el pasado viernes. Un día en que se tuvo que concluir el tercer partido de la serie a la 1 PM, cuando un dia anterior cayó un aguacero en el Foro Sol que impidió continuar con el juego. El partido se suspendió en la sexta entrada, con el marcador a favor de los Tigres 4-3. En la reanudación del viernes, los diablos emparejaron el marcador a 4, pero los Tigres, a base de batazos largos, finiquitaron ese tercer juego, con marcador de 9-6, dejando todo listo para la coronación por la noche del mismo dia (así quedó estipulado por las reglas de la LMB).
Y para darle cerrojazo final, los Tigres se despacharon con la cuchara grande nuevamente. Dos cuadrangulares de la "chispa" Carlos Gastélum, y uno de ellos Grand Slam, le puso el último clavo al ataúd de los diablos, para que ese duelo terminara en un abultado score de 13-9, y con ello festejar la décima estrella del equipo.
El jugador más valioso, Iker Franco. Sinceramente pensé que podría ser Pablo Ortega y su fantástico pitcheo que dio en el segundo de la Serie. Pero Franco también aportó mucho al equipo, sobre todo en sus carreras producidas, y la forma de manejar el pitcheo de su equipo.
Fue un triunfo grande de los Tigres de Quintana Roo, ensombrecido por la situación del Salón de la Fama del Béisbol. El presidente de la LMB, Plinio Escalante, anunciando en el tercero de la Serie del Rey que cerraban el nicho de los inmortales en la sede de Cervecería Cuauhtémoc-Moctezuma. Una situación que aún no esta aclarado del todo, y que según se dice, cambiaría de sede hacia Culiacán, Sinaloa. Allá ya tienen todo listo para que sea la nueva sede. Pero, aquí en Cervecería no se ha dado un informe oficial de lo ocurrido, y la Liga que no da una versión oficial.
Por mi parte, contento y feliz por ese nuevo título de los Tigres. Y espero que el año siguiente, se pueda dar un bicampeonato, contando con la misma base de peloteros actual en el equipo.
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